Eurodiputados cuestionaron duramente al representante de la empresa NSO Group, Chaim Gelfand, consejero General y oficial en Jefe de Cumplimiento de la compañía, durante una sesión del comité que investiga los abusos cometidos con esta tecnología dentro de la Unión Europea, informó Proceso.
Las y los representantes pidieron explicaciones sobre por qué la empresa continúa afirmando que el malware Pegasus solo es utilizado para combatir a la delincuencia organizada y grupos terroristas, cuando en los hechos ha sido usado en la región (y el mundo) para espiar a periodistas, personas políticas de oposición y activistas, entre otros.
Como es común en las intervenciones públicas de la empresa, su representante insistió en que Pegasus “es vendido para salvar vidas” y que no pueden evitar que las agencias de inteligencia a quienes les venden el malware lo utilicen mal; además, se escudó en el secreto comercial para evitar hablar sobre clientes específicos. El vocero aseguró que al menos 5 países que integran la Unión Europea utilizan Pegasus y que solo estos pueden ser los usuarios finales de la tecnología.
Los países que adquieren el malware que son sometidos a un proceso de “revisión de debida diligencia” para poder adquirirla y que se revisa anualmente, la cual se compone de la información sobre el respeto a los derechos humanos en el país, el estado de derecho y las leyes nacionales, de acuerdo con EURACTIV.
“No todo era perfecto, cometimos errores y estamos aprendiendo […] Estamos poniendo la ética por encima de los ingresos”, declaró Gelfand.
La actitud del representante provocó molestias en la comisión, debido a lo que consideraron, como falta de respuestas específicas y su “desconexión completa entre la realidad y lo que dice (…) es un insulto a nuestra inteligencia”.
Finalmente, un eurodiputado polaco cuestionó a la compañía sobre el papel que juegan las empresas intermediarias en la venta del malware a distintos gobiernos, como ha ocurrido en Polonia y México, aunque el representante insistió que solo los gobiernos reciben la tecnología y esta es instalada directamente por ingenieros de NSO Group.
En los últimos meses, los escándalos involucrando a Pegasus en la UE se han multiplicado: a finales de abril Citizen Lab dio a conocer que 63 personas vinculadas al independentismo catalán fueron objetivo del malware entre 2017 y 2020; la oficina de Boris Johnson, primer ministro de Reino Unido, también fue espiada con el malware, y el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, también fue objetivo de Pegasus.
Imagen (CC BY) Gibrán Aquino