Apple consiguió una primera victoria que podría sentar un precedente para la resolución del caso San Bernardino.
Un juez del estado de Nueva York, James Orenstein, negó una petición del gobierno de los Estados Unidos para que Apple extrajera información de un iPhone, con una versión anterior al iOS 8, cosa que ya ha ocurrido en el pasado, informó Techcrunch.
La sentencia del juez Orenstein se basó en considerar como excesivo el uso de la All Writs Act, que obliga a terceros a cumplir con órdenes judiciales para ayudar a resolver un caso, la misma que el FBI está usando para obligar a Apple a crear una “puerta trasera” para el iPhone de Syed Farook, uno de los presuntos terroristas del ataque el 2 de diciembre de 2015 en San Bernardino.
“Las implicaciones de la posición del gobierno son de tan largo alcance — en términos de lo que permitiría actualmente y lo que implicaba en su intención original en 1789 — que podrían producir resultados absurdamente impermisibles”, explicó Orenstein en la sentencia, en una cita retomada por The Intercept.
Orenstein aseguró también que la ley podría, o no, obligar moralmente a Apple a ayudar al gobierno, pero no legalmente, puesto que el Congreso de los EE.UU. había permitido a las empresas de telecomunicaciones crear dispositivos seguros.
Imagen original de Jonathan: FBI
