El gobierno de Israel confiscó archivos y suprimió información de la empresa NSO Group, desarrolladora del software Pegasus, para evitar que se compartieran secretos de Estado en los procedimientos legales derivados de una demanda presentada por Meta en 2019 en contra de la compañía israelí, reveló el consorcio de medios Forbidden Stories.
La demanda, presentada ante una corte de California, en Estados Unidos, se dio después de que NSO Group abusó de una vulnerabilidad en el servicio de mensajería WhatsApp para atacar a más de 1,400 objetivos en al menos 20 países, incluyendo México.
Nueve meses después, en julio de 2020, el gobierno israelí solicitó la incautación de archivos en la oficina de NSO Group, debido al proceso legal que enfrentaría la compañía. Además, Israel presentó una orden de silencio sobre la información relativa al caso, para mantener la incautación en total confidencialidad, lo que impedía a diversos medios de comunicación publicar cualquier información sobre los documentos que pedían y que querían poner bajo reserva.
“Estas revelaciones ponen en tela de juicio el compromiso de Israel de regular imparcialmente a NSO Group y arrojan dudas sobre su capacidad de proporcionar justicia, verdad y reparación a los afectados por el programa espía Pegasus”, declaró Donncha Ó Cearbhaill, director del Laboratorio de Seguridad de Amnistía Internacional.
Después de años de seguir el caso, Forbidden Stories tuvo acceso a más de un millón de correos electrónicos, documentos y otros archivos obtenidos por la organización sin ánimo de lucro Distributed Denial of Secrets, donde se pudo mostrar cómo Israel trató de proteger a NSO Group y la información confidencial que conserva de la demanda iniciada por WhatsApp.
Los archivos filtrados también sugieren que el Ministerio de Justicia israelí presionó a NSO Group para que eliminara de los expedientes judiciales cualquier rastro que implicara que Israel es cliente de NSO y utiliza la tecnología Pegasus.
En febrero de 2024, el tribunal que llevaba el caso dictaminó que NSO debía entregar a WhatsApp “todo lo relevante al software espía”, pero no obligó a la empresa a compartir su lista de clientes ni la información sobre la arquitectura de sus servidores. Aún con esto, los archivos judiciales de WhatsApp de julio de 2024 sugieren que NSO se ha negado a “participar significativamente en el procedimiento de revelación de pruebas”.
Este no es el primer caso donde Israel ha intervenido o dificultado investigaciones sobre el uso de Pegasus en el mundo. En España se negó a cooperar en una investigación sobre abusos del software, donde se espió a integrantes de la clase política española, entre ellas el Presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez.
Imagen: (CC-BY) Gibrán Aquino