Twitter terminó el acceso de las agencias estadounidenses de seguridad al servicio de análisis de la red social Dataminr, en un movimiento que algunos medios han visto como parte de un alejamiento entre Silicon Valley y el gobierno de Estados Unidos.
Dataminr, fundada en 2009 y de la cual Twitter es dueña en cinco por ciento, tiene acceso a todos los tuits de la red social y se dedica a analizarlos para encontrar patrones que dejen entrever nuevas noticias de último minuto, explica la revista Wired.
La aplicación utiliza algoritmos para dar a esos patrones contexto, identidad y los entrega en la forma de una alerta noticiosa con todo el procesamiento de big data y a un grupo muy selecto de clientes.
Entre los clientes estaban la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) y la Agencia Central de Inteligencia (CIA), de acuerdo con The Wall Street Journal, Dataminr habría alertado a las agencias de seguridad estadounidenses sobre los ataques de París en noviembre de 2015.
“Queremos permitir a las agencias de procuración de justicia y los servicios de inteligencia saber cuándo están pasando malas cosas en tiempo real”, declaró a Wired Aki Peritz, exmiembro de la CIA y profesor adjunto en la American University.
Distintos medios como Business Insider, Ars Technica y Wired consideran que Twitter estaría preocupado por no mostrarse demasiado cercano a las agencias de seguridad debido a las tensiones causadas por el reciente debate sobre cifrado y privacidad entre la industria y el gobierno.
Pero en un comunicado enviado a varios medios, Twitter minimizó la acción y la consideró como una ampliación de sus políticas de manejo de información y privacidad.
“Dataminr utiliza tuits públicos para vender alertas noticiosas de último minuto a organizaciones mediáticas como Dow Jones y la agencias de gobierno como la Organización Mundial de la Salud, no con propósitos de vigilancia. Nunca autorizamos a Dataminr o a cualquier tercero vender información al gobierno con propósitos de vigilancia e inteligencia. Esta es una antigua política de Twitter, no un nuevo hecho”, explicó Twitter.
La empresa de Jack Dorsey argumentó también que gran cantidad de la información es pública y que el gobierno debería de procesarla solo.
Defensores de derechos humanos coincidieron en que la postura de Twitter no es tan simple como solo quitarle una herramienta de interpretación a las agencias, sino que tiene que ver más con la protección de usuarios.
“Twitter no quiere ayudar a la vigilancia más allá de lo que se requiere legalmente”, declaró a Wired el abogado, miembro de Access Now, Peter Micek.