Lenovo bloquea la instalación de software libre y pierde juicio en la Profeco

Abr 21, 2016 | Sin categoría

La firma de equipos de cómputo y teléfonos celulares Lenovo perdió una demanda ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) por no dar a conocer correctamente todas las características con las que contaba uno de sus equipos.

Esta resolución, que admite que la empresa faltó a su compromiso con el consumidor, es un ejemplo de cómo en la actualidad muchas veces las personas que compran un equipo terminan sin ser dueñas de éste.

Jacobo Nájera, un programador mexicano y miembro de Enjambre Digital, compró un equipo de la empresa china el 11 de noviembre de 2014, pero al tratar de desinstalar el sistema operativo Windows 10, que venía establecido por defecto del fabricante, se encontró con que no podía.

Nájera trató de instalar el sistema operativo de libre distribución Debian, pero la función secure boot, habilitada en el dispositivo, no lo permitía.

Tras buscar ayuda en distintas áreas de la empresa, sin que el problema fuera solucionado, el programador topó con una pared ya que Lenovo le informó que debido a sus políticas comerciales no le podía indicar cómo suprimir la función, informó la revista Proceso en un seguimiento del caso.

Nájera presentó su demanda en la Profeco el 15 de enero de 2015, en ésta argumentó que el fabricante no había sido claro en los detalles del equipo, ya que de haber sabido que la computadora no permitía la instalación no la habría adquirido.

El secure boot de Windows es una característica de seguridad que solo admite programas supuestamente certificados, pero al mismo tiempo no permite la instalación de software como Debian.

Además, depende del fabricante habilitar esta función.

En agosto de 2015, la Profeco resolvió a favor de Nájera, pero por violar el Artículo 7 de la Ley Federal de Protección al Consumidor, en el que se establecen las obligaciones de los proveedores de informar a los consumidores sobre las condiciones de los bienes que ofrecen y multó a la empresa por, apenas, 4 mil pesos.

Lenovo no solo incurrió en una práctica contra el consumidor, sino que falta a la neutralidad tecnológica, ya que evita que se pueda instalar el software de otro proveedor en su equipo, explicó a El Economista el abogado Agustín Ramírez.

Además, abusa de sus clientes, ya que limita la forma en que estos utilizan su propiedad, dañando su derecho a manipularla.

Actualmente, muchas empresas utilizan el software de sus dispositivos para ejercer un control sobre las acciones del usuario y obligarlo a acudir a distribuidores, reparadores y vendedores de piezas oficiales y autorizados.

Esto únicamente beneficia a los fabricantes quienes buscan asegurar sus intereses financieros, sin considerar a los usuarios, durante la vida del aparato.

La Profeco se limitó a admitir que Lenovo había incumplido la ley, pero no ejerció ningún mecanismo para obligarla a cambiar esta política dañina y anticompetitiva.

De acuerdo con Nájera, el juicio proseguirá en otras instancias y agotará todos los recursos legales después de esta primera instancia en la que obtuvieron reconocimiento de la violación de Lenovo.


Imagen original de Wei Ti Chiang: Lenovo

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