Algunos angoleños están rompiendo las barreras del zero-rating usando a Free Basics de Facebook y Wikipedia Zero de la Fundación Wikimedia para acceder y compartir cientos de contenidos culturales en Internet.
La situación ha provocado problemas para Wikimedia, quien proporciona el servicio Wikipedia Zero en conjunto con una empresa de telecomunicaciones angoleña, Unitel, desde 2014, debido a que muchos de estos contenidos infringen leyes de derechos de autor, reportó el sitio especializado en tecnología de Vice, Motherboard.
Pero al mismo tiempo, para los angoleños –quienes esconden contenidos como películas o música en entradas de Wikipedia y los comparten a través de Facebook– es una gran victoria, ya que les permite acceder a bienes que de otra forma parecen inalcanzables o reservados a una élite que sí tiene acceso al “verdadero” Internet.
Esto se debe a que los esquemas de zero-rating limitan la cantidad de contenidos que se pueden ver en la red, ya que permiten acceder solo a un número de sitios pactados, en este caso por los proveedores de Internet locales y Facebook o Wikipedia. Esto se suma a la baja conectividad del país africano, apenas 17 por ciento de usuarios en 2012.
Wikimedia ha intentado combatir este uso de su plataforma bloqueando grupos de direcciones IP que se cree están utilizando Wikipedia Zero desde Angola, pero esto también representa un problema para la fundación, ya que también se limita la capacidad de creación y expresión de un sector de su comunidad.
La fundación y su plataforma son estrictas en cuanto al uso de contenido protegido por derechos de autor, por lo que se encuentran en una seria disyuntiva.
“Entendemos que es un reto manejar este repentino flujo de nuevos editores para nuestra existente comunidad. Ésta parece ser una importante y crucial conversación para nuestro movimiento, como un todo. Espero que podamos encontrar una manera para convertir este momento en Angola en una oportunidad para aprender cómo lidiar con lectores y editores”, explicó a Motherboard Adele Vrana, jefa del proyecto Wikimedia Zero.
En esencia, el problema no proviene directamente de la forma en que se están aprovechando las grietas de un servicio, sino que las autoridades han querido reemplazar políticas públicas de conectividad con programas privados, que muchas veces benefician a las empresas que los conducen.
Ésta no es la primera vez que uno de estos programas es modificado para obtener un acceso completo a la red.
En 2013, el activista paraguayo Matías Insaurralde, quien programó un prototipo de aplicación que le permitiría utilizar el Messenger de Facebook para conectar un teléfono celular con Free Basics al “verdadero” Internet utilizando un segundo teléfono sin restricciones de servicio como un proxy.
“Tú podrías establecer una lista de amigos, o amigos selectos, que te permitirán navegar a Internet a través de ellos — como gente confiable”, explicó Insaurralde durante una entrevista, también a Motherboard, en 2013.
El zero-rating viola la neutralidad de la red al promover una forma de Internet segmentada, un filtro de burbuja, y es contrario a las prácticas de competencia económicas. Su puesta en práctica está prohibido en países como India, que rechazó recientemente a Free Basics, Holanda y Chile, entre otros.
La forma en que los angoleños están usando estos servicios para acceder de forma real a grandes cantidades de información y bienes culturales merece una discusión más elaborada sobre la protección al derecho de autor, en un país con un acceso tan limitado a estos.