456 personas en México fueron espiadas con el spyware Pegasus entre abril y mayo de 2019, durante el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador, revelan documentos judiciales del litigio entre WhatsApp y la empresa israelí NSO Group.
Como parte de las pruebas para el juicio, WhatsApp aportó un listado que expone el país de origen de 1,233 víctimas de Pegasus. De acuerdo con los datos, México fue la nación con más víctimas en esa ocasión (456), seguido de la India (100) y Baréin (82).
Además, estos ataques estarían vinculados con la explotación de una vulnerabilidad en WhatsApp que fue usada en contra de personas usuarias del sistema operativo Android.
Durante la audiencia ante el juez, los representantes de NSO Group también afirmaron que México es uno de sus clientes involucrados en este caso, lo que confirma la abrumadora evidencia del despliegue de este spyware durante el sexenio anterior.
Esta información inédita muestra, por primera vez, la escala del espionaje estatal con Pegasus que ha sido sistemáticamente negado por el gobierno mexicano. Según los datos proporcionados por WhatsApp, el número de ataques correspondientes a México representa 37 por ciento del total de los incidentes documentados.
En 2022, la investigación Ejército Espía reveló que la Secretaría de la Defensa Nacional suscribió un contrato por un “Sistema de Monitoreo Remoto de Información” con Comercializadora Antsua –empresa con derechos exclusivos para vender Pegasus– con fecha del 12 de abril de 2019. A la fecha, la SEDENA se niega a entregar la información sobre dichos contratos, pese a la decisión inatacable del INAI.
La investigación Ejército Espía también expuso que el operador final de Pegasus en México es el Centro Militar de Inteligencia, una agencia militar secreta cuya existencia ha sido erráticamente negada por la SEDENA. Desde el CMI, se ha espiado ilegalmente a personas defensoras de derechos humanos y periodistas involucradas en el esclarecimiento de abusos cometidos por las Fuerzas Armadas.
A la luz de esta nueva evidencia, resulta alarmante la dimensión del espionaje militar durante el sexenio de López Obrador. Cabe destacar que las 456 víctimas identificadas por WhatsApp corresponden únicamente a un periodo de dos meses (abril-mayo de 2019), lo que sugiere la verdadera escala de la vigilancia ilegal en México y la gravedad del encubrimiento de estos abusos por parte del gobierno mexicano.
Además, la aceptación de que México es cliente de NSO Group por parte de los propios representantes de la empresa tira por la borda los intentos por negar lo innegable. Las mentiras de la administración pasada han quedado expuestas ante las abundantes pruebas del uso de Pegasus, cuyo alcance real es aún desconocido, pero sin duda, de proporciones mayúsculas.
Reiteramos el llamado a que el gobierno actual rompa con el pacto de impunidad militar y emprenda una investigación imparcial e independiente que garantice a los cientos (y quizá, miles) de víctimas del espionaje ilegal el acceso a la verdad y la justicia; así como una urgente reforma legal que establezca controles y salvaguardas a las facultades de vigilancia por parte del Estado.

Imagen (CC BY): Gibrán Aquino / Andrés Timm