La red social X, antes Twitter, habilitó por defecto una función de llamadas audio y vídeo en todas las cuentas de la plataforma sin aviso previo. Desafortunadamente, esta nueva característica permite que las personas usuarias sean rastreadas si no modifican la configuración, debido a que comparte la dirección IP, informa El País.
La dirección IP puede servir para identificar la ubicación general de nuestros dispositivos, ya que sirve para enviar y recibir información en línea, tal como una dirección postal convencional.
Al poder rastrear la ubicación aproximada de una persona, este ajuste se convierte en un cambio especialmente delicado en regímenes que practiquen la represión política e incluso puede comprometer fuentes sensibles en investigaciones periodísticas.
Para bloquear las llamadas de audio hay que ir a la opción “Configuración y privacidad”, dar clic en “Privacidad y seguridad”, luego en “Mensajes directos” y, desde ahí, darle al botón “Habilitar llamadas de audio y vídeo” que, si no se ha tocado previamente, estará activado.
Un caso similar se presentó con Telegram el año pasado, donde personas expertas en seguridad dieron a conocer que la aplicación podía filtrar la dirección IP de personas usuarias mediante una llamada, ya que por defecto Telegram utiliza una conexión de extremo a extremo entre los interlocutores “para mejorar la calidad y reducir la latencia”.
La novedad generó descontento entre muchas personas usuarias, que se quejan de que un cambio de este tipo sea aplicado sin previo aviso y en todos los dispositivos a la vez, más aún cuando X no menciona en la descripción de este nuevo servicio si las llamadas de audio y vídeo están o no cifradas.
Hasta ahora se sabe que las llamadas de audio en la plataforma solo se pueden hacer si las personas están conectadas entre sí, es decir, si se siguen mutuamente o han intercambiado al menos un mensaje directo.
Imagen: (CC-BY) Gibrán Aquino