Una comisión especial del Senado de Polonia, creada a partir de las revelaciones de la investigación Project Pegasus en 2021, ha publicado un informe en el que determinó que la adquisición y uso del malware Pegasus fue ilegal bajo las leyes locales, publicó John Scott-Railton, investigador del Citizen Lab de la Universidad de Toronto.
En el caso de Polonia, se documentó el uso de Pegasus en contra del senador Krzysztof Brejza, quien fue atacado en 2019 mientras se encontraba coordinando la campaña electoral de un partido de oposición. Con el paso del tiempo, se fueron descubriendo otras víctimas del malware, como el padre y la exasistente de Brejza, entre otras figuras políticas críticas al partido en el poder.
En el informe, se dictaminó que las elecciones de 2019 no fueron justas, ya que las intervenciones telefónicas por parte de las autoridades de Polonia “se parecían a las acciones de los delincuentes informáticos rusos que atacaron a Estados Unidos y a los países europeos durante sus campañas electorales”.
Así mismo, la comisión notificó a la fiscalía por la presunta comisión de delitos por parte de funcionarios públicos relacionados con la compra y uso de Pegasus. Además, recomendó la adopción de una ley que sujete a los servicios policiales bajo el control del Comisionado de Derechos Humanos; y a los servicios de inteligencia al control del gobierno y del parlamento.
“Pegasus no es una herramienta operativa utilizada por los servicios, sino un arma cibernética, es decir, una herramienta para influir en el comportamiento de otras personas. Después de escuchar a los especialistas de Amnistía Internacional y de la Universidad de Toronto, podemos afirmar inequívocamente que Pegasus se utilizó en Polonia de forma extremadamente agresiva”, indicó el senador Marcin Bosacki, presidente de la comisión.
“Watergate, que provocó la caída del presidente Nixon, es pan comido en comparación con el asunto Pegasus […] Esta arma monstruosa no se utilizó para proteger a los ciudadanos, pero, como demostró nuestra comisión, se utilizó para perseguir a personas a las que no les agradaban las autoridades”, afirmó Michał Kamiński, vicepresidente del Senado.
De acuerdo con Scott-Railton, el informe de la comisión que investigó el uso de Pegasus en Polonia concuerda con una tendencia mayor: “las investigaciones minuciosas siguen encontrando que el spyware Pegasus es dañino para las democracias europeas, incluyendo la seguridad de sus procesos electorales”.
De igual manera, el Comite PEGA del Parlamento Europea ─encargado de investigar el uso de Pegasus en los países de la Unión Europea─ señaló en su reporte final que el caso de Polonia demuestra “un sistema de vigilancia de la oposición y críticos del gobierno, diseñado para mantener a la mayoría gobernante en el poder”.
“En este momento crítico para el futuro de la democracia, la industria mercenaria del spyware, fuera de control, está directamente menoscabando nuestros valores comunes, seguridad y derechos humanos”, concluyó el investigador del Citizen Lab.
Imagen: (CC-BY) Gibrán Aquino