Un estudio realizado en la comunidad de programadores GitHub comprobó que la programación hecha por mujeres es mejor aceptada siempre y cuando no se sepa que fue hecho por ellas.
“Nuestros resultados sugieren que aunque las mujeres en GitHub son mas competentes en general, los prejuicio contra ellas siguen existiendo”, explicó uno de los autores del estudio, citado por The Guardian.
Los investigadores revisaron cerca de 3 millones de propuestas de código para proyectos en la comunidad y descubrieron que el 78.6 por ciento de lo programado por mujeres era aprobado, contra un 74.6 por ciento de los hombres.
Al buscar una explicación sobre la disparidad, los investigadores revisaron varios factores: si era por la dimensión de los cambios; o si era porque las mujeres dominan ciertos lenguajes de programación.
Después, los autores revisaron si existía un mayor impulso de algunos sectores al trabajo impulsado por mujeres, quienes representan solo el 11.2 por ciento de los programadores de GitHub, pero descubrieron, en cambio, que los perfiles de programadoras que parecían más neutrales tenían mayor aceptación que aquellos en que el perfil era “identificable” con el de una mujer.
Estos perfiles tenían un menor nivel de aprobación que el de los hombres.
El debate sobre cómo la discriminación por género afecta a los entornos digitales y al tecnológico no es nuevo; de acuerdo con la revista Wired, en un artículo publicado en 2014, apenas el 13 por ciento de las compañías con inversiones de riesgo en el segmento de tecnología tenían una co fundadora y solo el 10 por ciento de negocios vinculados al sector de desarrollo de software eran dirigidos por mujeres.
Un estudio del Babson College citado por The Atlantic, del mismo año, encontró que entre 2012 y 2014 las compañías del segmento con una mujer a la cabeza solo recibieron el tres por ciento del total del capital de riesgo.
Aunque el panorama parece cambiar lentamente, en 2015 Intel se impuso la meta de alcanzar un 40 por ciento de trabajadores que fueran o mujeres o representantes de una minoría, considerados los afroamericanos, hispanos y nativos americanos.
A finales del año, la compañía, que contaba con 86 por ciento de empleados hombres, blancos y asiáticos, contaba con un 35.5 por ciento de empleadas y con un 12 por ciento de empleados de alguna minoría, reportó Vox.