El nuevo centro de datos de Microsoft, ubicado en el municipio de Colón, en Querétaro, podría incrementar la crisis hídrica que se vive en el estado, afirma una investigación del medio Context.
Actualmente, el estado de Querétaro sufre de una crisis hídrica importante con 14 municipios en sequía extrema y excepcional, la mayoría de ellos al sur de la entidad, zona en la que se encuentra el municipio de Colón. Este municipio cuenta con 67 mil habitantes, y dos de sus principales presas están casi secas, dejando a los agricultores y campesinos de la zona luchando con cosechas muertas y dependiendo de pipas de agua para satisfacer sus necesidades diarias.
En este contexto, los grandes centros de datos, como el que planea abrir Microsoft en Colón, consumen vastas cantidades de agua. Por ejemplo, de acuerdo con una estimación de la Universidad de California, en Riverside, la demanda total para mantener los centros de datos que soportan los grandes sistemas de inteligencia artificial podría ser más de la mitad de la extracción total anual de agua del Reino Unido para 2027.
Así mismo, hay que tomar en cuenta que a esta estimación le faltan datos, ya que muchas empresas han mantenido bajo resguardo la información sobre la cantidad de agua que utilizan e incluso la mitad de ellos ni siquiera miden el recurso hídrico utilizado, afirma la investigación.
Otro caso de similar al de Colón ocurre en Uruguay, donde Google aceptó que un centro de datos en Montevideo necesitaría 7.6 millones de litros de agua potable al día, equivalente al consumo cotidiano de 55 mil personas. Esta es una cifra que enciende los focos rojos para el país, ya que sufre de una sequía histórica de la que no ha salido en tres años.
Mientras tanto, en Estados Unidos, el senador Edward Markey ha presentado un proyecto de ley para obligar a las empresas a revelar el impacto medioambiental de la inteligencia artificial, tras los informes sobre conflictos que hay por el agua entre agricultores y estas empresas en el desierto de Arizona.