Los departamentos de policía de diversas ciudades de Estados Unidos están utilizando la controversial tecnología de reconocimiento facial para perseguir a personas que supuestamente participaron en disturbios durante las protestas del movimiento Black Lives Matter (BLM), meses después.
Por ejemplo, la Policía de Miami utilizó el programa Clearview para identificar y arrestar a una mujer que supuestamente habría arrojado una piedra a oficiales de policía durante una manifestación en mayo.
Aunque la policía tiene una política que impediría utilizar esta tecnología contra personas llevando a cabo actividades legales, el jefe de la policía aseguró que en este caso está permitido por haber un hecho violento de por medio, informó Ars Technica.
De manera similar, aunque utilizando otros programas para reconocer a las personas a través de sus imágenes en redes sociales, han surgido reportes en la prensa de arrestos por participar en protestas durante los meses pasados en Columbia, Carolina del Sur; la ciudad de Filadelfia y la ciudad de Nueva York.
Paradójicamente, las protestas del movimiento BLM han denunciado constantemente el uso de las tecnologías de reconocimiento facial, ya que se ha identificado que uno de sus principales sesgos es que falla más en identificar correctamente personas de pieles oscuras y rasgos no caucásicos.
La utilización de esta tecnología para rastrear a personas que supuestamente habrían cometido delitos durante manifestaciones puede tener un gravísimos efectos en contra del ejercicio de libertades, como el derecho a la protesta.
Además, está en duda la legitimidad en el uso de servicios que recolectan imágenes de las personas sin su consentimiento y de plataformas que no existen para ese propósito, ni informan a la ciudadanía.
Imagen de Johnny Silvercloud (CC BY-SA 2.0)