Privacy International presentó, el 18 de enero de 2018, un amicus curiae ante la Suprema Corte de los Estados Unidos como parte del caso United States v. Microsoft, que se remonta al año 2013.
El recurso fue firmado por 26 organizaciones –entre estas, R3D: Red en Defensa de los Derechos Digitales– además de académicos, y busca establecer que la acción legal emprendida por el gobierno de los EE.UU. podría afectar el derecho fundamental a la privacidad de millones de personas alrededor del mundo.
A finales de 2013, el gobierno de EE.UU. solicitó a Microsoft, a través de una orden judicial bajo la Ley Sobre Comunicaciones Almacenadas (SCA), información de una cuenta de correo electrónico, como contenido de algunos correos y otras informaciones privadas asociadas con la cuenta, almacenada en los servidores en Irlanda de la empresa.
Microsoft rechazó la entrega de la información que se encontraba en los servidores europeos, argumentando que la ley utilizada no autorizaba al gobierno estadounidense obtener datos que no estuvieran en su territorio.
A pesar de contar con un acuerdo legal conocido como “Acuerdo de asistencia legal mutua”, para poder solucionar la limitación territorial de su legislación, el gobierno de EE.UU. decidió tomar una acción “unilateral”, como la denomina PI en un comunicado al respecto, que vulnera las leyes de protección de datos de la Unión Europea e Irlanda.
El amicus curiae presentado por PI explica que la postura del gobierno estadounidense podría sentar bases legales para justificar la violación masiva de leyes de protección de datos de todo el mundo, además de que obligaría a empresas que ofrecen servicios en línea a violar leyes para satisfacer las órdenes judiciales emitidas en EE.UU.
Finalmente, también establece que la Corte Suprema debería rechazar la postura del gobierno, ya que la SCA no tiene un carácter extraterritorial, ni se deberían aplicar leyes estadounidense que interfieran de forma irracional con la soberanía de otros países.