Granjeros, políticos y miembros de la industria de la reparación y la sociedad civil se están organizando para apoyar la iniciativa de “Reparación Justa” de Nebraska, una iniciativa para implementar el derecho a reparar en esta entidad de los Estados Unidos.
La legislación obligaría a las compañías a proveer a los consumidores y talleres de reparación independiente con herramientas, manuales de servicio y refacciones para que no estén limitados por un único distribuidor.
Esto es especialmente problemático en un estado agricultor, como es Nebraska, ya que en la actualidad los tractores y maquinaria para el campo se han vuelto equipo altamente especializado cuyas refacciones, diagnóstico y reparación monopolizan empresas como John Deere a través de la Gestión Restricciones Digitales (DRM).
Debido a que los centros de servicio escasean en el estado, reparar un tractor a través de John Deere representa un obstáculo para los granjeros que puede generar graves pérdidas económicas, en una profesión que depende del tiempo y que quienes la practican están acostumbrados a mantener, reparar y modificar su propio equipo.
La iniciativa, que estaba programada para tener su primera audiencia el día de ayer, ha recibido el rechazo de grandes compañías de tecnología además de John Deere, como Apple y AT&T, quienes aseguran ésta traería problemas de seguridad y violaciones a la propiedad intelectual, de acuerdo con el diario británico The Guardian.
Éstas se hayan preocupadas por el probable efecto dominó que pudiera representar la aprobación de la iniciativa de “Reparación Justa” en ese país. Nebraska solo es uno de ocho estados, Minnesota, Nueva York, Massachusetts, Illinois, Wyoming, Tennessee y Kansas, que están en camino de legislar iniciativas sobre derecho a reparar.
El activista Kevin Kenney aseguró, a The Guardian, que aprobarse esta iniciativa se daría a los granjeros de Nebraska la oportunidad de expandir sus habilidades a ramas como las ciencias computacionales, lo que permitiría la innovación de tecnología agrícola.